Lo que inicialmente fue catalogado como 'extraño objeto' -los trabajadores que lo encontraron enterrado lo describieron «como una bombona de butano vista desde arriba»-, lo cual había dado paso a diferentes conjeturas ante la posibilidad de que se tratara de un artefacto explosivo, ha resultado ser una campana metálica utilizada hace bastantes años atrás como aliviadero del alcantarillado. La situación de alarma llevó a un grupo de desactivación de explosivos de la Guardia Civil a desplazarse a la zona y a poner en marcha unos trabajos que comenzaron ayer por la noche y que han continuado a primera hora de la mañana de hoy martes cuando, por seguridad, se procedió al desalojo de los vecinos de las viviendas próximas al lugar. Finalmente todo queda en una simple anécdota y el 'extraño objeto' acabará en una empresa de reciclado.
Todo comenzó a última hora de la tarde del lunes cuando los operarios de una empresa de construcción que trabajan en una zanja abierta -junto al Ayuntamiento de Cieza-, para soterrar un cableado eléctrico, se llevaban la sorpresa, poniéndolo inmediatamente en conocimiento de la Policía Local y de la Guardia Civil, que movilizó hasta el lugar a miembros del Grupo de Desactivación de Explosivos (Gedex), comenzando entonces unos trabajos que se vieron interrumpidos con la llegada de la noche y que han continuado en la mañana de hoy martes.
Ya el mismo lunes por la noche los miembros del Gedex habían adelantado, tal y como recogía el Diario 'La Opinión' en una información de nuestro compañero Claudio Caballero, que, casi con toda probabilidad, no se trata de ningún artefacto explosivo antiguo. Aún así, por precaución y siguiendo órdenes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, los vecinos próximos al lugar fueron avisados de que a primera hora de esta mañana, por precaución, debían abandonar sus viviendas coincidiendo con la reanudación de las labores para extraer el objeto.
Llamamiento a la calma
El alcalde de Cieza, Pascual Lucas, lanzó un mensaje de calma mientras se aclaraba la situación por parte de los expertos en desactivación de explosivos de la Guardia Civil. El regidor ciezano explicó en un primer momento que los miembros del Gedex «no saben exactamente de qué se trata, aunque casi aseguran que no es un artefacto explosivo».
Posteriormente, esta misma mañana, tras conocerse el origen de lo hallado, afirmo que se trataba «de una campana de hierro utilizada hace muchos años para aliviar el alcantarillado. Desde el Consistorio se han seguido todas las recomendaciones de los expertos, y, una vez acabado el trabajo, todo ha vuelto a la normalidad», afirmaba el regidor ciezano, dando así por zanjado un asunto que llegó a suscitar cierta alarma y que hizo que las redes sociales se inundaran de falsas noticias que apuntaban, incluso, a la aparición de una antigua bomba de la Guerra Civil.











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