La Noria de Candelón vuelve a girar tras un parón de varios meses

Quizás por estar a la sombra del grave momento que atraviesa la Noria Grande, o puede que por estar situada en un lugar menos transitado, lo cierto y verdad es que poco o nada se ha sabido del mal estado que presenta otra de las Norias de Abarán: la de Candelón, que ha estado parada varios meses debido a algunos problemas que han ido surgiendo por el uso del día a día y motivados por un precario mantenimiento. Ahora, tras una semana de trabajo, los operarios de la empresa Ariño Gómez Hermanos han conseguido ponerla de nuevo en marcha, aunque a simple vista se aprecia que solo se trata de una solución temporal y que se hace necesaria una actuación en mayor profundidad que garantice su normal funcionamiento, así como un mantenimiento periódico que prolongue su vida por muchos años más.  

En esta actuación de emergencia se ha podido reparar el eje central y los cojinetes (engrasado, equilibrado y alineado); se han soldado algunos elementos metálicos, y se ha eliminado una gran cantidad de barro incrustado en las palas y los cangilones, principalmente, tal y como nos explicaba Antonio Ariño, que, junto a su hermano Ángel, acudió a la llamada de la Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Abarán, y la de la Comunidad de Regantes, para solventar las deficiencias que habían causado la parada de este elemento hidráulico.

Esta noria metálica fue construida en 1850, siendo remodelada en 1968 respetando la estructura original. Eleva el agua de la Acequia Charrara a una balsa que riega unas 15 tahúllas.
 

La Noria Grande en espera

Por otra parte, tal y como ya avanzamos anteriormente, nuestro ayuntamiento envió hace casi dos meses a la Consejería de Turismo y Cultura un proyecto para rehabilitar la Noria Grande, con un plan de actuaciones que contempla la sustitución de los elementos deteriorados y una reparación en profundidad. Su presupuesto rondará los 40.000 euros, como ya adelantó Joaquín Gamboa, concejal de Turismo.