«Gallego, emocionado, derramó sus lágrimas desde el cielo»

«Esto no es lluvia, son las lágrimas de Gallego desde el cielo, que se ha emocionado al ver aquí juntos a tantos de sus amigos». Con esas palabras iniciaba su actuación Filiu y Cía, abriendo un concierto que no se pudo completar en su totalidad debido a las inclemencias meteorológicas. El público aguantó el chaparrón como bien pudo y, aunque contrariado cuando se anunció la imposibilidad de que los grupos siguieran tocando, entendió la situación y supo agradecer el esfuerzo realizado por la organización y los integrantes de ‘Camela’ y ‘Mojinos Escocios’ por intentarlo hasta el último momento.

Pasadas las ocho de la tarde, la presentadora del evento, Eva Abril, comenzó el ciclo de agradecimientos y dio paso al primero de los grupos que llegaban al escenario. Era el turno de ‘Filiu y Cia’, a los que ya, aunque de forma tímida, acompaño la lluvia en los prueba de sonido. «Esto no es lluvia, son las lágrimas de Gallego desde el cielo, que se ha emocionado al ver aquí juntos a tantos de sus amigos», decía Filiu, que dejó su turno a ‘Caramelo’, quienes, tras interpretar su primera canción, se vieron obligados a interrumpir la actuación momentáneamente a la espera de que cesara la lluvia, regresando unos minutos después de manera breve pero intensa.

Los siguientes en llegar al escenario fueron los murcianos ‘Jamones con tacones’, y tras ellos ‘Echoes of Rock’, en esta ocasión con una formación bastante cambiada y configurada con grandes amigos del homenajeado. Ambas formaciones tuvieron de su parte la ausencia de la lluvia y pudieron ofrecer sus espectáculos prácticamente al completo.

Siempre estás ahí

Uno de los momentos más emocionantes de la noche llegó en la actuación de ‘Echoes of Rock’, que ofrecieron un repertorio con temas de algunos de los grupos preferidos de Gallego, entre los que no faltó el clásico de Barón Rojo ‘Siempre estás ahí’, con sorpresa final incluida. Tras ellos llegó la proyección de un divertido videoclip de Berni Castaño en el que Gallego ponía en práctica sus dotes para la interpretación. Meteorológicamente hablando, ese fue el momento más crítico de la noche y el que marcaría el resto del concierto, que ya quedó interrumpido de forma definitiva.

Primer comunicado de la organización

Hasta poco antes de las 23:00 horas la lluvia había hecho acto de presencia de manera intermitente pero sin demasiada intensidad. Sin embargo, la situación empeoró pasada esa hora y el agua empezó a caer con mayor fuerza, lo que ya ponía en serio peligro la aparición de los dos grupos que aún quedaban por actuar: Camela y Mojinos Escocios. El público, aunque impaciente y expectante por saber cual sería en desenlace final, aguantó el chaparrón estoicamente deseando que la lluvia arreciara cuanto antes y se pudiera seguir con el concierto. Pero no fue así.

A las 23:27 minutos, cuando parecía que el temporal ofrecía un respiro, Pedro Jesús Gallego, hermano del homenajeado, en nombre de la organización, explicaba que, tanto los técnicos de sonido, como los grupos que aún no habían aparecido en escena, estaban dispuestos a seguir adelante si el tiempo experimentaba alguna mejoría. Eran momentos en los que tocaba seguir esperando y en los que solo cabía cruzar los dedos para que la lluvia ya no regresara y el concierto pudiera reanudarse.

Desde la organización -nos consta- se intentó hacer todo lo posible por revertir la situación y conseguir que la noche pudiera acabar como todos deseábamos: disfrutando de dos de las actuaciones más esperadas por el público.

Con escobas y fregonas se trabajó para que los charcos que se habían ido formando sobre el escenario desaparecieran, evitando así que pudiera haber algún cortocircuito con el cableado eléctrico del equipo de sonido. Se secaron los monitores, columnas de audio e instrumentos, todo por conseguir que el concierto pudiera seguir. Pero faltaba la prueba definitiva: saber si el equipo de sonido, que se mojó de forma repetida a lo largo de la noche, respondería.

Todos sobre el escenario a modo de agradecimiento

Los peores presagios comenzaron a hacerse realidad al filo de la una de la madrugada. El equipo de sonido no superó la prueba y había que comunicar al público que era imposible seguir. Todos quisieron dar la cara para trasmitir la mala noticia. Todos sobre el escenario, y de nuevo volvió la lluvia.

Dioni, de Camela, tomó la palabra el primero para decir lo que nadie quería oír. «Nos es imposible actuar esta noche. Os agradecemos de corazón que hayáis venido. Nosotros estábamos dispuestos a esperar a que dejara de llover. Pero ha llegado un momento en el que el equipo de sonido se ha mojado de tal manera que es imposible que podamos actuar», decía el vocalista de Camela, que, tras comprobar la desilusión que sus palabras habían llevado al público, intento -y lo consiguió- levantar los ánimos de todos arrancándose con el estribillo de una de sus canciones más conocidas, ‘Sueño contigo’. Fue todo un detalle, y el público supo agradecerlo.

«Estamos todos con el compromiso y con el cariño de que, cuando se pueda, buscar una nueva fecha y ofrecer este homenaje. Espero que lo comprendáis. Que Dios os bendiga a todos», añadió Dioni

El líder de Mojinos Escocios agarró entonces el micrófono para compartir y respaldar todo lo dicho por el vocalista de Camela, añadiendo además, con ese tono humorístico que le caracteriza, lo siguiente: «Se ha escuchado decir que son lágrimas de Gallego y no lluvia lo que está cayendo esta noche del cielo, pero nosotros nos quedamos con otra versión, la que le hubiera gustado a él: que se está meando en todos nosotros. Hemos venido aquí a pasar una noche de fiesta, como a él le hubiera gustado, pero ya no es posible. Pero como ha dicho el Dioni, volveremos», aseguraba 'El Sevilla'.

Ángeles, voz femenina de Camela, también quiso dar las gracias al público. «Gallegó estará orgullosísimo del comportamiento que habéis tenido todos vosotros de estar aquí, pese a mojaros. Esto queda pendiente para otra ocasión», aseguró la cantante.

Gracias

Mientras el público, resignado pero reconociendo el esfuerzo que se había hecho por parte de organización y artistas para intentar poder concluir el espectáculo, abandonaba el recinto, desde la organización nos hacían llegar personalmente otra nueva muestra de agradecimiento. «Trasmítele a todo el mundo nuestras más sinceras gracias por todo el apoyo que hemos recibido, por asistir a este concierto homenaje, por aguantarse hasta el final con el deseo de que el tiempo nos dejara acabar, y por haber aceptado y comprendido que más no hemos podido hacer». Eran las palabras de Pedro Jesús Gallego y Pedro Valcárcel, las caras visibles de la organización, pero tras ellos, compartiendo sus mismos sentimientos había un gran equipo de personas que han trabajado muy duro y durante mucho tiempo para que este homenaje en forma de concierto fuera posible. No pudo ser de inicio a fin, pero aún así, todas esas personas que se han esforzado por hacerlo posible merecen nuestro mayor respeto y apoyo. La cosa no terminó como a todos nos hubiera gustado, pero estamos seguros de que habrá otra ocasión para intentarlo y conseguirlo. Tiempo al tiempo.