Un vigilante de seguridad fue el primero en perseguir este viernes al presunto atracador de la gasolinera situada en el polígono industrial de Blanca, al que, tras una larga huida, la Guardia Civil logró arrestar. El supuesto autor del robo frustrado, tal y como ya adelantó este medio, niega los hechos y asegura que estaba haciendo 'running' por la zona. El instituto armado investiga ahora si el sospechoso está implicado en otros asaltos a gasolineras de la zona ocurridos en las últimas semanas.
El vigilante -que no trabaja en la estación de servicio asaltada-, explicó que, en el momento de ocurrir los hechos, se encontraba en un bar situado a escasos metros y, al percatarse de lo ocurrido, acudió con su coche de empresa a interesarse por la situación.
Según recogen hoy nuestros compañeros del diario ‘La Verdad’, éste pudo ver al atracador, armado con una escopeta, cogiendo el dinero de la caja y saliendo luego de la gasolinera «con la escopeta debajo del brazo». El vigilante de seguridad asegura que, al verlo, el ladrón «se quedó sorprendido» y comenzó una huida a toda carrera. Con ayuda de su vehículo, el trabajador lo persiguió y trató de cortarle el paso durante varios minutos, hasta que llegaron los agentes de la Guardia Civil y lograron detenerlo.
El valor de este vigilante, cuya actuación sirvió para que se lograra atrapar al presunto delincuente, era ayer reconocido por sus conocidos. «Me han dicho que estoy loco», comenta.












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