Rescatan a una niña y a su padre que no podían salir del río Segura en Blanca

Efectivos de la Policía Local de Blanca y de Guardia Civil rescataron del río este domingo a una niña y a su padre quienes no podían salir por sus propios medios después de que la menor cayera accidentalmente y su progenitor se lanzara al agua para socorrerla. El suceso ocurrió a primera hora de la mañana en el paraje conocido como 'Huerta de Arriba', en el término municipal de Blanca. Afortunadamente tanto la niña como su padre se encuentran en buen estado.

El Centro de Coordinación de Emergencias 1-1-2 Región de Murcia recibía una llamada a las 10:22 horas informando que un adulto, junto a una niña, se encontraban en el río y no podían salir del mismo en una zona del paraje conocido como 'Huerta de Arriba', junto a la carretera RM-514, en el término municipal de Blanca.
 

Hasta allí se dirigieron de inmediato patrullas de la Policía Local de Blanca y de Guardia Civil de Abarán, y hasta tres agentes (Fernando Peñaranda, guardia civil del Cuartel de Abarán, y Javier Guardiola y Antonio Brocal, de la Policía Local de Blanca), se lanzaron al agua para, no sin gran dificultad, poder rescatar a los dos afectados.

Es de destacar también la colaboración de un joven, vecino de Blanca, que fue el primero en acceder al lugar y prestar ayuda a la menor hasta la llegada de los afectivos policiales, que se tuvieron que emplear a fondo para acometer un rescate que resultó muy complicado dadas las dificultades que presentaba la zona, muy poblada de cañas y vegetación. 

Según fuentes de Emergencias, la niña pudo caer al río de manera accidental cuando se encontraba caminado por la zona, y su padre se lanzó al agua para intentar sacarla, aunque, finalmente no pudo hacerlo y también él necesitaba ayuda. Ambos, junto a otros familiares, se habían desplazado desde Orihuela para pasar el día dándose un baño en la zona.
 

Al lugar del suceso se movilizó también una ambulancia de la Gerencia de Urgencias y Emergencias Sanitarias 061 (una Unidad Móvil), cuyos sanitarios atendieron in situ a la niña, de 11 años, que no precisó traslado sanitario, mientras que el padre no requirió asistencia sanitaria.