Las fuerzas de seguridad tratan de identificar al autor de una serie de sucesos ocurridos este miércoles en Abarán donde, además de la ya conocida agresión sexual sufrida por una vecina, todo hace indicar que el mismo individuo estaría detrás del intento de robo del carro de reparto de un trabajador de Correos, así como del robo consumado de un ciclomotor. Se busca a un varón joven, alto y delgado, que vestía ropa de color oscuro y -una particularidad-, utilizaba unos guantes 'de trabajo' de color azul y gris.
Según la información obtenida por esta redacción a través de entrevistas con las propias víctimas de los sucesos, al ya relatado episodio de agresión sexual contra una persona mayor, se uniría el ocurrido en la calle Molino de la Encomienda donde, un trabajador de Correos, tuvo que salir detrás de un sujeto que se había apoderado de su carrito del reparto postal aprovechando unos segundos de descuido del cartero. Éste estaba haciendo una entrega en un domicilio y había dejado el carrito en la puerta, y, al salir, observó como el 'amigo de lo ajeno' ya huía con el 'botín' por una pronunciada cuesta.
En ese momento, el cartero inicio la persecución y logró que el ladrón soltara el carro, que, con la inercia, regresó cuesta abajó varios metros hasta acabar cayendo al suelo desparramando el correo por la calle. Por fortuna, el trabajador pudo recuperar intacta la correspondencia y sin que su útil de trabajo sufriera daños importantes. El empleado público describió al autor de este incidente como un joven, alto y delgado, que cubría sus manos con unos guantes azules y grises.
Robo de un ciclomotor en una zona muy cercana
No tuvo la misma suerte otro vecino de Abarán al que, mientras realizaba tareas en un pequeño huerto situado en la avda. rio Segura, frente a la estación de autobuses, le sustrajeron el ciclomotor que había dejado aparcado en el lugar minutos antes.
En este caso, la víctima del robo no pudo ver al presunto ladrón, aunque, debido a la cercanía donde ocurrió este incidente con el ya citado del 'cartero', unido al hecho de que solo transcurrieran unos minutos entre uno y otro, hace pensar que ambos serían obra del mismo autor.
Por otra parte, según ha podido conocer esta redacción, un conocido del propietario del ciclomotor objeto de robo se cruzó con el ladrón -antes de conocer lo ocurrido-, cuando éste conducía el vehículo por la carretera de Cieza, lo cual hace sospechar que el 'amigo de lo ajeno' tendría fijada su residencia en ese municipio.
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