Empleados de Correos de la oficina de Cieza, entre los que se encuentran actualmente cuatro abaraneros, están secundando desde este martes paros de dos horas en su jornada laboral «como señal de protesta ante los sistemáticos recortes a los que se está sometiendo a esta entidad, mermando significativamente la capacidad en el desarrollo diario de su trabajo», explican los afectados en un comunicado.

Según denuncian los carteros, «son reiteradas las decisiones anómalas que venimos asumiendo y que nos incapacitan para prestar un servicio público de calidad, uno de los pilares básicos en los que se asienta esta empresa. La desaparición de secciones, los cambios inesperados e innecesarios, la ausencia de contrataciones por bajas, vacaciones, aumento de producción, etc, han hecho que nos hayamos visto abocados a tomar la decisión de recurrir a la huelga, no descartando el inicio de otras movilizaciones».

El sindicato CCOO advierte, por su parte, que «si la empresa continúa con la supresión de puestos fijos, no da marcha atrás en los recortes injustificados de plantilla, y no aumenta la contratación con el personal suficiente para poder prestar un servicio postal público de calidad a los ciudadanos, continuará con las movilizaciones por irresponsabilidad de los gestores».

Tras el anuncio de Correos de recortar unilateralmente y sin consenso 35 puestos de trabajo fijos en Murcia, CCOO, CSI.F y Sindicato Libre iniciaron el pasado 24 de febrero un calendario de movilizaciones con dos horas de paro en los centros afectados por este severo ajuste.

En el segundo día de protestas, los trabajadores de las unidades de Cieza y Caravaca secundaron masivamente los paros, con concentraciones en las puertas de los centros para mostrar su rechazo a los recortes de personal que está realizando la Dirección Territorial de Correos «de forma ilegal y sin previa consulta a las organizaciones sindicales».

Según fuentes sindicales, «Correos quiere un trabajo de más calidad con menos personal y con contratos precarios», por eso, CCOO denuncia que «los trabajadores/as están sufriendo diariamente las consecuencias del recorte de plantilla con acumulaciones en los centros de cartas, certificados y paquetes, cargas en los carros muy por encima de las recomendadas, recorren muchos más kilómetros y se les obliga a hacer una entrega diaria de productos más especializados que conllevan más tiempo de trabajo».

«Y es que pese a la caída de la carta, -sigue diciendo el comunicado sindical- el envío de paquetes y notificaciones no para de crecer, dato que la empresa no está contemplando y que está provocando no sólo una precarización del empleo, con contratos por horas y días, algo que no es admisible en una empresa pública, sino que Correos también ha renunciado a la prestación del servicio postal público de calidad. Prueba de ello es que los murcianos están recibiendo su correo uno o dos días a la semana en vez de los cinco estipulados», termina diciendo el comunicado.