El intenso temporal de lluvia de este sábado provocó un importante desprendimiento de rocas y tierra en la carretera RM-514, de Blanca a Abarán. Una de las grandes piedras caídas, de aproximadamente una tonelada de peso, invadía parte de la calzada, aunque no fue necesario cortar el tráfico.

El conductor de un vehículo que circulaba por la zona a primera hora de la tarde alertó del suceso, incidiendo en el gran peligro que podía llegar a representar el obstáculo sobre la vía.

El desprendimiento se localizó en el punto kilométrico 2’5, en sentido Abarán, aunque dentro del término municipal de Blanca.

Operarios de mantenimiento de la Dirección General de Carreteras se desplazaron a la zona para proceder a la retirada de las piedras y despejar la calzada, una labor que quedó concluida sobre las 19:00 horas, aunque se ruega a quienes circulen por la citada carretera lo hagan con precaución ante la probabilidad de nuevos desprendimientos.