Ocurrió a finales del pasado mes de agosto. Un vecino alertó a la Policía Local tras advertir como, sobre las tres de la madrugada, alguien había levantado la persiana de una peluquería de la calle Médico Gómez.
 

Los agentes se desplazaron con celeridad hasta la zona y lograron localizar, a pocos metros del establecimiento, a un hombre, vecino de Abarán y de nacionalidad española, quien, tras ser identificado, habría confesado ser el autor de los hechos, argumentando que, "al ver que la persiana no disponía de candado de seguridad, la había levantado buscando pasar allí la noche para no tener que dormir en la calle".

Según ha podido conocer este medio, los policías encontraron la persiana de nuevo en su posición inicial y, tras levantarla, comprobaron que la puerta de acceso al comercio se encontraba cerrada con llave y todo era normal en el interior, si bien es cierto que, aunque levemente, la cerradura presentaba signos compatibles con un intentó de haber sido forzada, algo que posteriormente también constataría la propietaria del local.

Durante la actuación policial, según la información que maneja esta redacción, se habría llegado a 'cachear' al identificado, no descubriéndosele objeto contundente alguno, no llegando a ser detenido.