Imagen de archivo

Tal y como ocurre cada primer viernes de marzo, el camarín del Cristo de Medinaceli en la iglesia de San Juan Bautista se abrió a los fieles a través de un sencillo acto de fe que se convierte cada año en uno de los más populares de la Cuaresma. Culminaba así el triduo a través del cual la Hermandad del Silencio y Cristo de Medinaceli rendía culto y devoción a la imagen.

A lo largo de buena parte de esta jornada y en diferentes fases del día, multitud de personas, procedentes de todos los rincones de Abarán, fueron acudiendo a esta cita, bajo un intenso silencio, para cumplir un ritual que se repite año tras año en señal de veneración ante la sagrada imagen.

La iglesia de San Juan Bautista abrió sus puertas a primera hora de la mañana (7:00) y permaneció así, de manera ininterrumpida, hasta las 23:00 horas. 

También en Hoya del Campo

La iglesia de Santiago Apóstol en Hoya del Campo acogió también este viernes distintos actos religiosos en torno a la imagen del Santísimo Cristo del Rescate, con una misa en su honor, la imposición de escapularios y nombramiento a los nuevos hermanos de esta hermandad y la presentación del cartel anunciador de Semana Santa, obra de la abaranera Ana Gómez.