Me niego a bajar los brazos ante una situación que va a destruir uno de los signos identitarios de nuestro municipio. Sí, porque 'Las Colonias' van a destruirse. Y lo va a realizar nuestra corporación gobernante sin sopesar sensatamente lo que quieren hacer con este histórico campo de fútbol.

Pero tampoco observo en la población un interés especial en que se conserve un valor y patrimonio histórico que tanto dio a nuestra población. 

En esta sociedad decadente, donde no reivindicamos nuestros intereses, y donde aceptamos todo lo que los gobernantes nos imponen, quiero lanzar un grito reivindicativo, que nos despierte y nos permita evitar LA DESTRUCCIÓN DE 'LAS COLONIAS'.

En primer lugar, digo que es un DESPROPÓSITO ARQUITECTÓNICO, porque van a destruir los tres graderíos existentes, con capacidad para 2.500 personas.
    

Se pactó por unanimidad en un pleno del pasado año, lo siguiente: el graderío que hay a la entrada, con capacidad para 1.250 personas, lo van a derribar  completamente, con la idea de poder agrandar el terreno de juego y poner los banquillos, y en un futuro los vestuarios.

El fondo norte, donde está la visera, se derribará más de un 50% y se quitaría la visera.

 El graderío donde están los banquillos debería quedarse como esta, sin banquillos.

Se rehabilitarían el graderío de los banquillos y lo que quedaría del fondo norte, con recolocación de la visera.

- Esta rehabilitación se haría con 330.000 euros (150.000 que daría de subvención la Comunidad Autónoma, y el resto, y con 180.000 euros que pondría el ayuntamiento).

A pesar de no estar de acuerdo con la destrucción de 'Las Colonias', pactamos ese arreglo para evitar males mayores, aunque el desastre estaba cantado para nuestra catedral del futbol regional.

En segundo lugar, DESPROPÓSITO DEPORTIVO, por las siguientes razones:
 

- En ningún momento se habló de rehabilitar el césped del terreno de juego, ni de arreglar la iluminación.

Quiero indicar que, sin arreglar el terreno de juego ni la iluminación, 'Las Colonias' no son funcionales, es decir, ni son aprovechables por los equipos, ni se puede desarrollar el futbol con normalidad.

Este terreno de juego se utiliza durante 15 domingos al año, aproximadamente, por el Abarán CF,  y entre 15 y 20 entrenamientos los jueves previos al partido. Y debemos indicar, como así lo reconoce la inmensa mayoría de los que subimos a ver los partidos, con unas condiciones deplorables del césped, y con una deplorable iluminación que impide realizar los entrenamientos nocturnos con normalidad, así como el desarrollo de los partidos en invierno con la suficiente luminosidad que el juego exige.

Asimismo, indicar que el campeonato de verano (tan querido por nuestros futbolistas), se desarrolla de forma diaria durante junio y julio, con un terreno de juego deplorable y una iluminación muy deficiente, con la subsiguiente queja de todos los jugadores.

En tercer lugar, y muy, pero que muy importante, DESPROPÓSITO ECONÓMICO:

El gasto inicial era de unos 330.000 euros, de los cuales 150.000 eran aportados por la Comunidad, y el resto, 180.000, los ponía el ayuntamiento, que me gustaría saber de donde los sacaría. Pero con el paso del tiempo ese montante económico se está incrementando desorbitadamente, y me comentan que ya ronda los 400.000 euros en total.

Y me preocupa muchísimo más, de donde van a sacar esos dineros (más de 250.000, que deberá poner el ayuntamiento), pues va a ser de la partida de obras y servicios que se le concede al ayuntamiento para el bienio 2024-2025. 

Me gustaría indicar que ese dinero es el que se utiliza para arreglar caminos rurales, calles del municipio, alumbrado, etc., es decir, necesidades irrenunciables de nuestro municipio.

Y nos preguntamos: ¿Merece la pena este dispendio económico insoportable para nuestra economía local, a cambio de no terminar de arreglar una dependencia municipal para el uso que se construyó, que no es otro que jugar al futbol? Pues sin césped arreglado, ni una iluminación adecuada, ese gasto de dinero (400.000 euros), no modifica para nada la situación calamitosa que sufre nuestras Colonias.

Indicar que si con posterioridad se colocase el césped artificial, se arreglase la iluminación, y se construyen los vestuarios, el montante de la operación sería de muchos cientos de miles de euros, que no sé de donde se sacarían o si sería una construcción prioritaria para las arcas municipales. Por tanto, eso sería una promesa, como otras tantas, y no una realidad.

Pero, ¿qué podríamos hacer los amantes de este estadio glorioso, memorable e irrenunciable?

1º,- Evitaríamos la destrucción de los graderíos y conservaríamos la MAGNÍFICA  arquitectura actual, con la rehabilitación del graderío completo. Indicamos que si se pueden rehabilitar dos trozos de graderío, como van a realizar en el estudio actual ¿Por qué no se pueden rehabilitar los tres graderíos?

Su precio sería infinitamente inferior a lo que cuesta su destrucción y se podría hacer poco a poco, dando trabajo a abaraneros que lo realizarían con profesionalidad y agrado, para restaurar una obra que debe permanecer de forma indefinida en nuestra localidad.

2º,- Colocaríamos un césped artificial y reformaríamos la iluminación, con un leasing a 10 años, pagando lo mismo que cuesta el mantenimiento de 'Las Colonias' anualmente. Es decir, utilizaríamos el gasto anual para mantenimiento de 'Las Colonias', para rehabilitar lo fundamental, como es el césped y la iluminación, y así lograr que nuestro querido campo de fútbol pueda utilizarse diariamente durante todo el año por todos los equipos de nuestra localidad, sin hacer dispendios económicos, que no tenemos.      

     
Qué bonito sería ver a nuestros alevines y benjamines dándole patadas al balón desde el fastuoso graderío de 'Las Colonias', como ha sucedido en otras épocas.
 

En resumen, MUCHÍSIMO MENOS GASTO, asequible a las arcas municipales, con uso magnífico y mayoritario por todas las bases de los equipos abaraneros.     
  

 Por lo tanto, SI EL SENTIDO COMÚN primase:
  

1º,- CONSERVARÍAMOS 'LAS COLONIAS' restaurándolas, como siempre las hemos conocido.

2º,- NO REALIZARÍAMOS GASTOS FASTUOSOS, sin finalidad alguna, QUE NO PODEMOS PERMITIRNOS, y así daríamos respiro a las arcas municipales, gastando con sentido común.

3º,- Tendríamos una instalación deportiva modélica regionalmente, y sería superutilizable por los jóvenes futbolistas abaraneros durante todos los días y noches del año.

Por lo tanto, hago un llamamiento a los abaraneros del futbol, y al resto de ciudadanos, para que sopesen los argumentos de este artículo y tengan a bien transmitirlos, a quien corresponda, para restablecer el sentido común en nuestros dirigentes.

                    Julio Yelo García.