Era la crónica de un suceso anunciado. Este miércoles por la noche, pocos minutos antes de las 22:00 horas el estruendo causado por la caída de más de mil kilos de escombros alertó a los vecinos. Esos mismos vecinos ya habían puesto en conocimiento de las autoridades la existencia del problema. Solo el hecho de que, afortunadamente, no hubiera que lamentar ningún tipo de daños, aliviaba ese enfado vecinal ante lo que era un acontecimiento anunciado y ya consumado, en parte.  

Pocos minutos antes de las 22:00 horas el estruendo causado por la caída de más de mil kilos de escombros alertó a los vecinos, que enseguida supieron de donde provenía el inquietante ruido. Esos mismos vecinos ya habían puesto en conocimiento de las autoridades la existencia del problema y, tras el suceso, era evidente el malestar de todos ellos porque no se hubieran llegado a tomar ningún tipo de medidas al respecto. Solo el hecho de que, afortunadamente, no hubiera que lamentar ningún tipo de daños, aliviaba ese enfado vecinal ante lo que era un acontecimiento anunciado y ya consumado.

Una vez conocido el suceso y el evidente peligro que suponía una calzada en zona curva, con poca visibilidad, de noche, llena de cascotes y sobre la que incluso llegaron a caer dos pesadas vigas, los propios vecinos, tras llamar insistentemente al 112, a la Policía Local e incluso a la Guardia Civil, no dudaron en hacer de improvisados agentes de circulación y, con linternas o disparando los flashes de los teléfonos móviles, alertaron del evidente peligro a los vehículos que se acercaban a la zona. La conducta de esos decididos ciudadanos logró evitar, sin duda, que hubiera que lamentar accidentes de circulación en ese punto.  

Tras desplazarse al lugar, una patrulla de agentes de la Policía Local de Abarán señalizó la zona con indicaciones luminosas y dio aviso al personal de mantenimiento de carreteras de la Consejería de Fomento y Obras Públicas, cuyos operarios, en trabajos que se prolongaron hasta pasada la medianoche,  lograron retirar los escombros de la carretera y evitar el peligro en una zona sobre la que esperamos se actué con la mayor celeridad para evitar el derrumbe incontrolado del resto del inmueble, que, a duras penas todavía sigue en pie, y que supone un evidente riesgo para transeúntes y vehículos.

Salta a la vista

El mal estado de la edificación (situada en la carretera de Blanca, Avda. Los Puentes), así como su notable peligro de derrumbe y la peligrosidad que tal situación podría acarrear, ya fue recogido en nuestra sección ‘Salta a la vista’ con fecha del pasado 24 de agosto.