La Guardia Civil ha instruido diligencias a un cazador como presunto autor de delito de maltrato animal para esclarecer las circunstancias en las que dos perros sufrieron lesiones por disparos. Uno de los canes recibió el impacto de 58 perdigones -que le causaron lesiones graves y la pérdida de un ojo-, y el otro, un cachorro, tiene heridas en el hocico
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado la operación ‘BODEGUERO’ dirigida a esclarecer las lesiones producidas a dos perros víctimas de disparos por arma de fuego en el municipio de Campos del Río. La investigación ha culminado con la localización e investigación de un cazador, y con la instrucción de diligencias como presunto autor de delito de maltrato animal.
La operación inició cuando el propietario de unos perros denunció ante el cuartel de la Benemérita de Mula que sus canes habían sido víctimas de disparos por arma de fuego, y que uno de los canes tuvo que ser atendido en un hospital veterinario de Murcia, donde quedó ingresado debido a la gravedad de las heridas causadas por el impacto de 58 perdigones. Los proyectiles le provocaron múltiples heridas y la pérdida de visión en uno de sus ojos. El otro perro alcanzado por un disparo, un cachorro de pocos meses, presentaba heridas en el hocico, pero de carácter menos grave que el anterior.
Los indicios recabados por el Equipo de Investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) permitieron constatar que el propietario de los canes, a su vez, es propietario de una parcela que se encuentra incluida en un coto de caza y mientras el dueño paseaba junto a sus perros, presuntamente, un cazador aficionado a la caza de perdiz al reclamo disparó contra los cánidos.
Tras obtener todos los indicios necesarios, la Guardia Civil ha identificado localizado e instruido diligencias a la persona que, presuntamente, disparó a los perros, por delito de maltrato animal.
El delito de maltrato animal
El delito de maltrato animal se encuentra recogido en la reciente reforma del Código Penal, que lo define como el hecho de maltratar injustificadamente a los animales, mediante cualquier medio o procedimiento, causándoles la muerte es castigado con penas de seis a dieciocho meses de prisión e inhabilitación especial de uno a dos a cuatro años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales.
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