La historia se repite. Siguiendo idéntico guión que en ocasiones anteriores, los amigos de lo ajeno volvieron este lunes a dejar tras de sí la huella de su paso por, al menos, dos viviendas ubicadas en el paraje abaranero de El Boquerón, donde, además de causar destrozos y ponerlo todo patas arriba, lograron apropiarse de algunos útiles y electrodomésticos de pequeño tamaño -en uno de los casos-, y desmontar todo el cableado eléctrico de una instalación de placas solares y un sistema de vigilancia, en otro.   

«Nos sentimos indefensos y vigilados. No se explica de otra manera. Precisamente yo, que no suelo faltar de aquí, es muy llamativo que justo la tarde que no estoy aprovechen mi ausencia para entrar y reventarme otra vez la casa», explica uno de los vecinos afectados que ya es la cuarta vez que tiene que pasar por esta amarga experiencia. En su caso, tras lograr arrancar de cuajo una robusta reja que protege una de las ventanas de la vivienda, los cacos recorrieron todo el inmueble y se hicieron con todo cuanto hallaron de valor. «Aún no sé exactamente todo lo que se han llevado porque no he querido tocar nada hasta que la Policía Judicial, después de tomar huellas, me autorice a poder hacerlo», lamenta el afectado, «pero a primera vista echo en falta un ordenador portátil, un televisor de 32 pulgadas, una plancha y una batidora multiusos, además de una carabina de aire comprimido con un pequeño defecto en el gatillo», añade.   

Casi son pillados infraganti

En la otra de vivienda asaltada se da el caso de que su propietario, tras observar que las cámaras de vigilancia que tiene instaladas se habían quedado sin señal, acudió a comprobar a qué era debido y a punto estuvo de sorprender a los malhechores. «Estaba ya oscureciendo cuando llegue. Oí voces pero creí que eran los vecinos de otra casa que hay cerca de la mía. Cuando me di cuenta de que se trataba de un robo y quise reaccionar ya vi que se habían dado a la fuga», nos cuenta.

Su llegada a la casa evitó, al menos, que los cacos acabaran de consumar el robo después de que ya hubieran desmontado todo el cableado eléctrico de las placas solares y las baterías de almacenamiento, además de las cámaras de vigilancia que ya tenían también preparadas para llevarse. En este caso es ya la quinta vez que los amigos de lo ajeno visitan esta vivienda donde, pese a no lograr llevarse nada, dejan cuantiosos daños.

La Guardia Civil de Abarán, que ya este mismo lunes realizó una inspección ocular en las dos viviendas asaltadas, ha iniciado una investigación para, junto a la Policía Judicial, intentar descubrir quién está detrás de estos reprochables sucesos.